Comuneros de Tampacán, llevan veinte años luchando jurídicamente para rescatar sus tierras, fue invadida por los caciques de esa región, una familia priísta con poder, dinero y codicia. En un intento por retomar sus tierras, fueron amenazados por el expresidente municipal, Cristián Sánchez Sánchez, quien portaba un arma de alto poder.
CRÓNICA, COLABORACIÓN
Este día un actuario del Tribunal Unitario Agrario en compañía de integrantes del Comisariado de Bienes Comunales de Macuilocatl, del municipio de Tampacán, acudieron al predio que de manera irregular poseen, Cristian Joaquín y Crisógono Néstor, ambos de apellido Sánchez Sánchez, el primero ex alcalde de dicho municipio.
La resolución emitida por el Tribunal Unitario Agrario número 43 con sede en Tampico, Tamaulipas, en el expediente 207/43 ordenó restituir un área de 27 hectáreas a 91 comuneros, que representan a más de 700 habitantes de Macuilocatl.
Eran aproximadamente las 11 de la mañana, cuando las autoridades pacíficamente acudieron al lugar. Dentro de este predio está asentado el rancho de Cristian Joaquín Sánchez Sánchez, ex presidente municipal, ex diputado local, ex diputado federal e hijo de Crisógono Sánchez Lara, ex líder del Sindicato Nacional de Trabajadores del Estado de San Luis Potosí.
Ahí se encontraban los trabajadores del político priista, quienes de entrada impidieron la ejecución de la sentencia. Alrededor de 80 comuneros esperaban fuera del inmueble. Ante la negativa de los trabajadores de abandonar el lugar, el actuario pidió el resguardo del mismo.
Pasaron escasos minutos, cuando Cristian Joaquín Sánchez Sánchez, arribó al lugar y descendió de una camioneta modelo reciente color blanca.
«Que se te perdió Fili», bajo del lujoso vehículo amenazando con una metralleta AR15, a Filemón Hilario Flores, integrante de la comunidad y a todos lo que ahí se encontraban. Hecho que quedo asentado en las imágenes y vídeos que en este trabajo periodístico se muestran.
Con extrema violencia, ordenó al actuario quitar los candados que previamente se habían colocado como parte de la diligencia, y amagó a las autoridades. También les exigió a todos los presentes abandonar el lugar, ya que su gente estaba a punto de llegar con órdenes de disparar.
«Quiten el candado, voy a pasar, la voy a checar adentro y le voy a hablar a mi abogado y si la orden tiene que ver, la voy a checar, yo no me meto con nadie, no se metan conmigo».
De su camioneta descendió un acompañante del ex funcionario que de igual manera estaba armando. El ex presidente municipal continuó amenazando a Filemón Hilario Flores, también ex alcalde del municipio, y ex compañero de legislatura local de Sánchez Sánchez.
«Miren señores, muchos son mis amigos, yo con ustedes no tengo problemas, al pendejo (Filemón Hilario) que estaba ahí, si lo voy a buscar».
Aseguro que conocía a la perfección el juicio, y les indico que se está por entregar una notificación a la comunidad, a través de la cual se ordena, que no pueden poner un pie en su rancho, detallo.
«La propiedad antes de que me notificaran a mi tenía otro dueño, ya lo sabe también su abogado, ya se ganó el juicio, ya nada más le van a notificar que no se pueden parar aquí, el propietario es otra persona, y lo que a mí me digan no me afecta porque yo no soy el dueño«, explicó.
Continuó, «jurídicamente hay otro dueño que ya le ganó el juicio a la comunidad, que no los engañen, quieren hacer valer la ley, traigan a la fuerza pública».
Insistió y se contradijo, «a mi rancho no van a entrar, no vuelvan a venir a poner el candado ahorita en media hora va a llegar gente y quien este dentro de mi rancho, le van a disparar».
Ante los ojos de desconcierto de los Comuneros, a punto de recuperar el predio que pelean desde hace más de 20 años decidieron, por seguridad, abandonar el lugar. Por el escenario de extrema violencia, el actuario no pudo cumplir el mandamiento judicial, dejando asentados los hechos en un acta.
Este es un hecho más del abuso de poder que se continúa cometiendo en medio de la Cuarta Transformación, que presume acabar con la impunidad y las injusticias.
ANTECEDENTES
El asunto data desde el año 1981, cuando por resolución presidencial se otorgó a la comunidad de Macuilocatl, municipio de Tampacán, 533 hectáreas, pero al momento de la entrega se dejó fuera una superficie de 29 hectáreas.
Mediante maniobras y actos de corrupción, dicho terreno fue protegido en favor del cacicazgo de la familia de Crisógono Sánchez Lara, mejor conocido como «El Chogono».
Se conoce que en este momento, «El Chogono», se encuentra prófugo de la justicia acusado de homicidio.
A su vez, el ayuntamiento de Tampacan está en manos de la priista, Brisseire Sánchez López, cuñada, de Cristian Sánchez, y quien fue acusada de utilizar todo tipo de métodos para recuperar el poder de este municipio, en un escenario intimidatorio y de compra de votos.
La solicitud de tierras fue publicada con fecha de 26 de octubre de 1976, es decir hace casi medio siglo. Sin embargo el plano originario de la comunidad data del año 1925.
Los afectados nunca desistieron de su lucha. De la misma manera que la tierra les fue despojada, el conflicto entre esta familia y los comuneros implicó una división y un choque de las comunidades indígenas, Nahuátl y los grupos priistas que mantuvieron el poder durante décadas.
Los Comuneros solicitarán el apoyo de la Guardia Nacional y de los elementos del resto de las corporaciones de seguridad para evitar agresiones que podrían surgir ante la impotencia y molestia del cacicazgo y llevar a cabo en los próximos días la ejecución de la sentencia a su favor.
