Cuidadoras Potosinas, el colectivo que impulsa la primera ley de protección a personas cuidadoras en nuestro país

Cuidadoras y tendedero

3 de agosto de 2022

  • El colectivo está formado actualmente por más de 200 personas en la capital potosina, y ya rebasan las 500, con los municipios.
  • Como parte de sus actividades para impulsar la ley de personas cuidadoras, realizaron un tendedero, afuera del Congreso del Estado, donde expusieron diversos testimonios que dan cuenta de la necesidad apremiante de que se les considere en la legislación.

La mañana del 2 de agosto, un grupo de integrantes del colectivo Cuidadoras Potosinas se manifestó pacíficamente afuera del Congreso del Estado de San Luis Potosí, donde colgaron un tendedero en que exhibían pancartas con testimonios de cuidadoras, en su mayoría mujeres, de hijos con discapacidad y de personas mayores o con condiciones incapacitantes permanentes. El propósito fue visibilizar las violencias de las que son víctimas a diario, así como explicar los diferentes tipos de violencia, desde la económica, la institucional, patrimonial, vicaria, familiar, hasta incluso se puede llegar a la sexual. Ellas piden que se apruebe la Ley Estatal de Protección a Personas Cuidadoras del estado de San Luis Potosí Ley Estatal de Protección a Personas Cuidadoras del estado de San Luis Potosí que las ampare, que ayude a generar condiciones que les dignifiquen, propuesta que ha sido presentada al congreso, con apoyo de la diputada Gabriela Martínez Lárraga.

Mariana Noriega, presidenta del colectivo, dirigió algunos de los testimonios presentados y habló a nombre de todas sus compañeras al instar a las autoridades para proteger los derechos de las personas cuidadoras, quienes, día a día se ven expuestas a múltiples agresiones, como el reciente feminicidio de una madre cuidadora en Jalisco, y la vulneración de sus derechos: “En el colectivo de San Luis Potosí tenemos personas cuidadoras con alto grado de vulnerabilidad, mujeres que son violentadas en su propio entorno familiar. En San Luis Potosí, hay más de 19 casos extremos de violencia contra mujeres cuidadoras, en los cuales ya ha habido intentos de feminicidio. Pese a la gravedad de las acciones, las autoridades han sido omisas, y esa también es una forma de violencia”.

La ley que ellas han impulsado abarcaría a cualquier persona que se dedica a cuidar a una persona enferma cuente con el reconocimiento como cuidadora, para evitar situaciones de las que son víctimas día a día, como el acoso laboral. De esta manera, se les estaría dando protección ante los patrones que no comprenden su situación. Asimismo, se buscaría darles facilidades de acceso a préstamos o fondos para quienes no pueden trabajar, debido a que están cuidando de su familiar las 24 horas, los siete días de la semana, pues la violencia económica es otra de las violencias que las personas cuidadoras enfrentan en su día a día. En caso de que se apruebe la ley que ellas han impulsado, que sería a nivel estatal, San Luis Potosí sería el primer estado en México en contar con una ley para personas cuidadoras.

Actualmente, no existe ninguna ley, en todo el país, que proteja a las personas cuidadoras o siquiera que se les mencione. Este desamparo legal, se suma a la indiferencia e incluso juicio que la sociedad emite hacia ellas. “¿Cómo podemos frenar la violencia sin empatía?”, pregunta Noriega, pues ésta se da en todos los contextos; desde la casa, en los entornos familiares, hasta por parte de las autoridades. “San Luis Potosí ve esos temas como algo ajeno, sin embargo, cualquiera de nosotros estamos expuestos a necesitar, en algún momento, ser cuidados o requerir cuidados para alguien cercano”.

Respecto al daño institucional, menciona Mariana Noriega, es grave porque el estado se está volviendo agresor por omisión: “No sólo no hay políticas públicas, sino que son omisos, protegen a los agresores, ejercen violencia institucional, desde una persona que atiende una ventanilla hasta un juez que desatiende casos, en el que los jueces vulneran los derechos del niño y de su madre. Los niños no pueden esperar a que el estado responda, sus necesidades son diarias, y las madres somos las que principalmente debemos hacer frente a todas ellas, incluso a pesar de los prejuicios, los regaños en el trabajo, la falta de recursos, de atención médica o de apoyo”.

Si el Estado no brinda las condiciones ni los espacios para que las personas con discapacidad puedan desarrollarse en igualdad, sus cuidadores deben buscar esas condiciones, deben suplir y atender todas esas necesidades, y es aquí donde su situación personal, económica, familiar, de salud, laboral, entre otras, se ven afectadas: “Como madres cuidadoras de hijos con algún padecimiento o discapacidad, así como de hijas cuidadoras, luchamos también por sus derechos, por protegerlos de la discriminación y del acoso, porque no les estamos haciendo un favor al incluirlos en los diversos contextos, como el educativo o social, es su derecho”.

Respecto a su situación y los juicios de la sociedad que deben enfrentar día a día, refieren que se trata de un ciclo de violencias, “por ejemplo, una madre de familia puede que sufra violencia en casa, por los cuidados, porque la culpan de la enfermedad del hijo; cuando sale, el vecino la agrede porque el hijo hace ruidos, porque llora a deshoras, porque grita; entonces, va con las autoridades, y éstas desestiman su caso, que en ese caso ya es violencia institucional; en la omisión viene la violencia del estado. Casi todas las cuidadoras hemos sufrido una o más violencias”.

¿Quiénes son las Cuidadoras Potosinas?

Es un colectivo que nació a partir de la necesidad. La primera en contar esta historia es su fundadora, Mariana Noriega, quien comenzó, desde hace años, con la fundación Hero, a raíz de las necesidades que ella detectó al ser madre de un niño con parálisis cerebral, una discapacidad adquirida tras ser olvidado por su padre en un vehículo con los vidrios cerrados. Al encontrarse como una madre que debe cuidar a sus hijos, buscar el sustento y cuidar 24/7 de un niño con discapacidad, Mariana buscó crear la Fundación HERO, desde la cual trabajan con la discapacidad, principalmente la discapacidad adquirida, para proporcionar apoyo emocional, tanatológico y psicológico.

Es ahí, en la confluencia de varias madres cuidadoras, que se encontraban en situaciones similares, como decidieron articularse y formar un colectivo, del cual piden a Mariana que lo dirija: “es un espacio cien por ciento de mujeres, sobre todo por lo emocional, en redes de apoyo, y que se sientan protegidas. El grupo de hombres estamos por abrirlo, porque son pocos, entre más, se abrirá un grupo de contención para hombres. Es muy diferente el manejo con cada uno”. Posteriormente se incorporaron al colectivo hijas que cuidan a sus padres adultos mayores, quienes enfrentan situaciones similares en cuanto a los cuidados, pues: “lamentablemente en México los adultos mayores llegan a la tercera edad con una muy mala calidad de vida y esto aumenta las necesidades de cuidados de tiempo completo”.

El colectivo está formado actualmente por más de 200 personas en la capital potosina, y ya rebasamos las 500, conformando los municipios, como los de la Huasteca potosina, desde donde las compañeras siguen recabando información e incorporando a más personas cuidadoras.

Desde el colectivo brindan apoyo a otras personas cuidadoras, “capacitamos a las mamás, las canalizamos a dependencias, les damos acompañamiento permanente, apoyo institucional, y todo lo que una mujer cuidadora necesita”. Asimismo, sus integrantes luchan por la aprobación de una ley que les brinde protección en el tema laboral, educativo, de acceso a la atención médica, pues cuidar es un trabajo de tiempo completo no remunerado que, en la mayoría de los casos, imposibilita a la madre o padre para seguir trabajando, lo que pone en riesgo no sólo su sustento y patrimonio, sino también las prestaciones y el acceso de atención médica a su persona y para el paciente que cuidan: “El hecho de que por qué no tenemos cómo trabajar la mayoría, porque no tenemos con quién dejar a nuestros pacientes. Si yo lo dejo solo para irme a trabajar, lo expongo a que fallezca, porque no puede estar sin atención, y ellos necesitan atención 24 horas al día los siete días a la semana. No todas podemos mantener un trabajo estable remunerado, por ejemplo, yo que sufro acoso laboral, y mientras más crece mi hijo, mayores son sus necesidades. Eso siempre nos deja al margen de los regaños, de los castigos o de los despidos, inclusive”.

Por tanto, ellas promueven esta ley que les ampare, como ciudadanos, como seres humanos que tienen derechos y necesidades y que necesitan el respaldo legal y de las autoridades: “Si el cuidador/cuidadora es protegido, por ende, el paciente queda protegido”, explicó la representante del colectivo ante los medios que atendieron la manifestación pacífica.

El cuidarismo es un tema que no ha sido trabajado en San Luis desde ninguna instancia, por lo que la lucha de este colectivo ha sido como nadar contra corriente: “Cuando se presentó la propuesta de ley, la mayoría de los diputados no sabían de qué estábamos hablando, la sociedad menos, hasta que la diputada Gaby y tu servidora comenzamos a hacer flayers”. Por ello, pide a los demás diputados que se sumen y apoyen la propuesta de ley. Ellas mismas les insisten, a través de este tendedero con testimonios, en la necesidad de detener la vulneración de los derechos de las personas cuidadoras y de ampararlas legalmente.

Además del trabajo que se hace en el colectivo, entre la orientación y apoyo a otros cuidadores, el diálogo que buscan establecer entre ellos y las autoridades y la gestión de la primera ley para cuidadores en México, el colectivo busca sensibilizar a la sociedad en estos temas, brindar capacitación e informar sobre las discapacidades, las necesidades y las violencias que sufren de manera continua. Esto lo hacen por medio de las actividades, las manifestaciones pacíficas y del canal de la fundación HERO en Youtube, donde tienen un programa llamado “Remamos”, en el cual la fundadora del colectivo entrevista a madres cuidadoras y hablan de lo que enfrentan día a día, las 24/7: “aparte de visibilizar las historias personales, se habla de temas específicos, por ejemplo, una madre me habló de la violencia obstétrica de la que fue víctima cuando nacieron sus hijos, de cómo su hijo, por una negligencia, adquirió la discapacidad, de cómo la maltrataron a ella”.

Las activistas pasaron tiempo en la exposición del tendedero, hablando con la prensa, explicando sus motivos. Lamentablemente, muy pocas personas se hicieron presentes por parte del Congreso del Estado, a pesar de que la intención era lograr este acercamiento y visibilización ante ellos, salvo personal de parte de la diputada Gabriela Martínez. Esto es muestra de la poca atención que las autoridades han dado al tema de las personas cuidadoras y a sus necesidades como ciudadanos y como seres humanos. A pesar de ello, Mariana, la dirigente del colectivo, cerró con la firme intención de defender la causa de colectivo y de ver más allá, en un futuro justo, condiciones de igualdad y dignidad para todos:

“Tengo dos sueños, uno es abrir una escuela de entrenamiento para perros de acompañamiento terapéutico, mi hijo tiene un perro de apoyo que, cada vez que él convulsiona, el perro va y lo contiene y detiene, y la otra es poner una residencia que cuente con el subsidio necesario, atendida por las mismas mujeres cuidadoras porque también somos profesionistas. Algunas somos psicólogas, médicos, maestras, educadoras, rehabilitadoras, ¿por qué? Porque sólo nosotras sabemos lo que vivimos, y que además de darles atención a los pacientes brinda un espacio seguro para las madres cuidadoras, a quienes definitivamente ya no pueden vivir solas porque necesitan o no tienen los recursos. Generar una comunidad donde todas estemos para apoyarnos a todas, donde yo pueda irme a trabajar tranquila porque sé que, si mi hijo necesita algo, habrá alguien que sepa cómo atenderlo si le una crisis; o que yo pueda dormir una noche tranquila porque sé que hay alguien que pueda apoyarme en la atención a mi hijo, para una poder tener calidad de vida. Es un sueño que suena muy difícil, pero hasta que yo respire, nunca voy a dejar de ver por él. Y si el estado no lo asume, pues seguiremos luchando, como lo hemos hecho hasta el día de hoy, con nuestros propios medios, con nuestro esfuerzo”.

Para conocer más sobre el colectivo, sus actividades y la información que generan y proporcionan, puedes seguir el siguiente enlace:

Página del colectivo: https://www.facebook.com/Cuidadoras-Potosinas-100992302574898

Canal en Youtube de la fundación: https://www.youtube.com/channel/UCLlUYKkyUMUbsCK1yKlFFNw