Redacción
En agradecimiento a Dios por el don de la vida y el respeto a la mujer, un centenar de fervientes católicos participaron en las actividades convocadas por la Iglesia Potosina en el marco de la tercera Marcha por la Vida, la mujer y la paz.
En un mensaje del Mons. Jorge Alberto Cavazos Arizpe, difundido días antes por redes sociales, se convocó a los fervientes católicos a asistir la tarde del día sábado a la ceremonia litúrgica celebrada en la Parroquia del Barrio de Tequis, Eucaristía que tuvo como tema principal una expresión del Papa Francisco, “Cada vida humana tiene un valor inestimable”.
Al término de la misa, los defensores de la vida marcharon por la Avenida Venustiano Carranza hasta la Plaza de Armas, varios de ellos vestidos con indumentaria en color azul y blanco, la mayoría llevaba alguna pancarta con expresiones a favor de la vida, “que tu vientre sea una cuna y no una tumba”, “di sí a la vida, no al aborto”, por ejemplo.
Ya en el Centro Histórico, organizadores manifestaron su postura en favor de la vida, de “reconocer la dignidad de todo ser humano en todo momento y circunstancia”.
